Lesión medular
Una lesión medular puede representar un punto de inflexión en la vida de una persona, afectando no solo a su movilidad, sino también a su independencia y bienestar emocional. El tratamiento de una lesión medular es un proceso complejo que implica múltiples enfoques médicos y terapéuticos, y varía según la gravedad y la ubicación de la lesión. En el Centro Lescer realizamos tratamientos de rehabilitación de lesiones medulares de forma integral con el fin de dar respuesta a las necesidades físicas, emocionales y sociales de nuestros pacientes.
Causas de una lesión medular
Tratamientos de lesión medular en Lescer
El tratamiento de lesión medular en el Centro Lescer tiene como objetivo maximizar la recuperación funcional, mejorar la calidad de vida desde el punto de vista físico y emocional, y ayudar a nuestros pacientes y a sus familiares a adaptarse a los cambios que la lesión medular puede haber causado.
Los tratamientos de lesión medular en Lescer aúnan a todo nuestro equipo de casi 50 profesionales de distintas disciplinas: médicos, neuropsicólogos, fisioterapeutas, logopedas, terapeutas ocupacionales, enfermeros y trabajadores sociales. Todos ellos participan de forma coordinada siguiendo un Patient Journey Map , que es un plan personalizado para cada paciente que nos permite proyectar y organizar nuestros tratamientos de lesión medular y, a su vez, nos facilita la comunicación con el paciente y sus familiares.
Puesto que en la Clínica Lescer contamos con diferentes unidades de trabajo (hospital, centro de día, atención domiciliaria, ambulatoria e incluso telerrehabilitadora), esto nos permite poder combinar las diferentes terapias ajustándonos a las necesidades de cada paciente, en función de los síntomas y de la gravedad de sus lesiones medulares.
Las diferentes terapias que se combinan dentro de un tratamiento de lesión medular individualizado en Centro Lescer son:
Tratamiento fisioterapéutico para la lesión medular
Nuestro equipo de fisioterapeutas trabaja para mejorar la fuerza muscular, la movilidad, la coordinación y la función sensorial.
Terapias de neuropsicología
La rehabilitación neuropsicológica nos permite estimular la función cerebral para mejorar la función cognitiva y que así el paciente tenga el máximo grado de autonomía.
Terapias de logopedia
Nuestros logopedas desarrollan diferentes técnicas y ejercicios que permiten restaurar la capacidad de hablar y de deglución.
Terapia ocupacional
Los terapeutas ocupacionales entrenan las habilidades motoras finas y desarrollan estrategias de adaptación en el hogar que permiten a los pacientes ser más independientes a la hora de realizar actividades diarias y de autocuidado.
Tratamiento farmacológico
Ante una lesión medular el tratamiento farmacológico puede ser necesario para tratar el dolor, prevenir la espasticidad muscular, mejorar la función de la vejiga y el intestino, y abordar otros síntomas relacionados con la lesión medular.
Asesoramiento psicológico
La adaptación a una lesión medular puede ser emocionalmente desafiante. La terapia psicológica y el apoyo emocional son esenciales para ayudar a los pacientes y a sus familias a enfrentar los cambios y desafíos emocionales que la lesión puede traer, con el fin de evitar o superar la ansiedad, depresión y frustración, que tanto afecta a los pacientes y a su entorno.
Apoyo y formación a las familias
Nuestro tratamiento de lesión medular también incluye un servicio de apoyo, información y educación sobre la patología y sus opciones de tratamiento tanto al paciente como a su entorno y familia, con el fin de que estén capacitados para gestionar la enfermedad en casa.
Tipos de lesión medular que tratamos en Lescer
Las lesiones medulares se clasifican según nivel, su gravedad y su efecto en la médula espinal y las funciones nerviosas:
Lesión completa
En una lesión medular completa que afecta totalmente a la médula, no hay función motora ni sensorial por debajo del nivel de la lesión. Esto significa que los impulsos nerviosos no pueden pasar y la persona experimenta una pérdida total de movimiento y sensación en las áreas del cuerpo afectadas por debajo de la lesión. Los tipos específicos de lesiones completas incluyen:
- Tetraplejía: Cuando la lesión se encuentra en la parte superior de la médula espinal, generalmente en el área cervical, afectando los brazos, las piernas y a menudo la capacidad de controlar la función respiratoria.
- Paraplejía: Cuando la lesión se encuentra en la parte media o inferior de la médula espinal, generalmente en el área torácica o lumbar, afectando a las piernas y, en algunos casos, la función intestinal y de la vejiga.
Lesión incompleta
Si se trata de una lesión medular incompleta, entonces hay alguna capacidad residual para transmitir impulsos nerviosos a través del área lesionada. Esto significa que puede haber sensaciones y movimientos limitados por debajo de la zona de la lesión.
Síntomas de la lesión medular
- Adormecimiento, hormigueo o pérdida y cambios en la sensibilidad.
- Parálisis progresiva o repentina.
- Debilidad o incapacidad para mover una parte del cuerpo.
- Dificultades para caminar.
- Dolor o presión en la cabeza, el cuello o la espalda.
- Pérdida de control de alguna parte del cuerpo.
- Incontinencia o retención urinaria o intestinal.
- Dificultad para mantener el equilibrio.
- Dificultad para respirar.
- Bultos extraños en la columna vertebral o la cabeza.
Secuelas de la lesión medular
Una lesión medular puede tener una variedad de secuelas que afectan a la función física, sensorial y emocional de una persona:
- Pérdida de movilidad y sensibilidad: Una de las secuelas más evidentes de una lesión medular es la pérdida parcial o total de movilidad y sensibilidad en las áreas del cuerpo que están por debajo de la lesión.
- Parálisis: Dependiendo de la ubicación y la gravedad de la lesión, puede haber parálisis en las extremidades inferiores (paraplejia) o en las extremidades superiores e inferiores (tetraplejia).
- Incontinencia urinaria e intestinal.
- Problemas respiratorios: Las lesiones medulares en la región cervical pueden causar dificultades para respirar debido a la afectación de los músculos respiratorios.
- Dolor neuropático crónico, que es una sensación de dolor anormal que proviene de los nervios dañados.
- Problemas en la función sexual: Las lesiones medulares pueden causar problemas de erección y eyaculación en los hombres; y de lubricación en las mujeres.
- Espasmos musculares: Es posible experimentar espasmos musculares involuntarios, que pueden ser incómodos o dolorosos.
- Problemas circulatorios: Las personas con lesiones medulares pueden experimentar cambios en la presión arterial, así como hinchazón en las extremidades.
- Problemas emocionales: Adaptarse a una lesión medular puede tener un impacto emocional significativo. Depresión, ansiedad, frustración y trastornos de adaptación son comunes en estos pacientes.
- Cambios en la percepción corporal: Algunas personas experimentan una sensación de desconexión o distorsión en la percepción de su propio cuerpo debido a la lesión medular.
Preguntas frecuentes sobre una lesión medular
La espasticidad es un trastorno muscular que implica un aumento del tono muscular (hipertonía). Este aumento en la tensión de los músculos hace que se pongan rígidos y provoca espasmos musculares involuntarios.
Decimos que una lesión medular es completa si no hay movimiento ni sensación en las áreas del cuerpo por debajo del nivel de la lesión. En cambio, en una lesión medular incompleta, aún hay algún grado de movimiento y/o sensación por debajo del nivel de la lesión. Para saber si la lesión medular es completa o incompleta, los médicos evalúan la función motora y sensorial. Estas evaluaciones pueden incluir pruebas de fuerza, sensibilidad y reflejos, junto con imágenes diagnósticas, como la resonancia magnética.
La médula espinal es una estructura del sistema nervioso central que no es directamente «fortalecida» de la misma manera en que se fortalecen los músculos mediante el ejercicio. Sin embargo, hay medidas y hábitos que pueden contribuir al mantenimiento general de la salud del sistema nervioso como llevar un estilo de vida saludable que incluye: una alimentación rica en antioxidantes, ácidos grasos omega-3 y vitaminas del complejo B, practicar ejercicio de forma regular, gestionar y reducir el estrés, mantener un peso saludable, evitar el tabaco y el alcohol, …