El trabajo de nuestros expertos fisioterapeutas está enfocado a la evaluación y el tratamiento de individuos con alteraciones de la función, el movimiento y el control postural debido a una lesión del sistema nervioso central (IBITA). Los fisioterapeutas fijan los objetivos para conseguir mayor grado de autonomía física y la optimización de los recursos motores. Tratan la espasticidad y la rigidez, las alteraciones de la sensibilidad, el equilibrio y la coordinación para recuperar la marcha, el equilibrio en bipedestación, las transferencias posturales y el uso de los brazos y las manos abordando cualquier clase de hombro doloroso.
En función de la evaluación previa del paciente, utilizamos diferentes técnicas:
LOKOMAT. El Centro Lescer cuenta con una Lokomat, una herramienta de robótica con cinta de marcha que asiste la locomoción en pacientes gravemente afectados. Proporciona un ambiente simplificado para el control postural, la propulsión, la coordinación, el paso y permite realizar una marcha a una velocidad normal. En la Lokomat se regula el soporte de peso, la velocidad y la ayuda por parte de la máquina, lo cual permite trabajar dentro de los principios establecidos en el entrenamiento de la marcha. Dichos principios son el aprendizaje motor que va de lo simple a lo complejo, la tarea específica, el número de repeticiones y la intensidad del entrenamiento.
PISCINA. Durante el verano, trabajamos con nuestros pacientes en la piscina al aire libre con el objetivo de mejorar sus capacidades motóricas, utilizando un medio diferente, que desafía el equilibrio y la coordinación al tiempo que facilita el movimiento. Contamos con profesionales formados en terapia acuática Halliwick, así como con la experiencia clínica de varios años realizando esta actividad.
TRABAJO EN SALA. Basándonos en el conocimiento del aprendizaje y control motor, neuroplasticidad y biomecánica, dentro de un análisis individualizado del movimiento, los fisioterapeutas desarrollan tratamientos específicos para conseguir la máxima capacidad del paciente, elaborando tareas coordinadas y eficaces, en las cuales se consiguen movimientos selectivos y económicos.
HIPOTERAPIA. Diversos estudios muestran la evidencia científica de la terapia con caballos en el control postural, el equilibro y la marcha. Un aspecto importante de esta terapia es la marcha tridimensional del animal que, siendo similar a la marcha humana, normaliza el tono, la estabilidad y las transferencias de peso. Debido a la temperatura del caballo, mejora el aspecto sensorial. Además, trabajar con una terapia diferente favorece la parte más emocional, cognitiva y supone un beneficio para nuestros pacientes. En esta técnica, nuestros fisioterapeutas trabajan conjuntamente con la Asociación Riendamiga.
